En la fabricación de tubos a partir de bandas metálicas, el proceso principal de la soldadura inductiva es la soldadura longitudinal. En un proceso continuo, se desenrolla el material en forma de banda y los bordes de estas bandas se moldean mediante una serie de rodillos hasta formar un tubo casi cerrado excepto por un hueco en forma de V. En este punto se coloca un inductor con forma de anillo, que induce una corriente circular que también fluye a lo largo de ambos bordes del hueco y los calienta hasta la temperatura de fusión. Unos rodillos comprimen el hueco para que el tubo pueda unirse sin necesidad de material de aporte.