La inducción (electromagnética) es un efecto físico que se genera al transformar un campo magnético en un campo eléctrico. Constituye el principio subyacente a todas las máquinas eléctricas, como generadores, transformadores o motores eléctricos y, por tanto, es también la base de la generación de energía eléctrica y de su transformación y uso. Cuando se expone un cuerpo conductor de la electricidad a un campo magnético variable con el tiempo, se genera (induce) una tensión que puede producir un flujo de corriente.
A decir verdad, en realidad se produce una interacción entre las corrientes y los campos de ambas corrientes, de forma que la corriente inducida contrarresta a la corriente inicial. Pero para entender el principio, basta con imaginarse que la corriente inicial crea un campo magnético que, a su vez, causa una corriente inducida.
Es importante saber que solo un cambio en el campo magnético produce un flujo de corriente inducido. Es por ello que la mayoría de las máquinas eléctricas funcionan con corriente alterna. La corriente alterna en la primera parte de la máquina crea un campo magnético alterno en el hueco y este causa la corriente alterna inducida en la segunda.
Si se comparan el calentamiento mediante inducción y mediante horno, destaca principalmente una diferencia.
El calentamiento inductivo se produce en la propia pieza de trabajo. De este modo no se ve limitado a la forma o al tamaño del horno, a la temperatura ambiente ni a la transferencia térmica.
En comparación con el calentamiento mediante horno, puede aumentarse significativamente la densidad de potencia para agilizar el proceso (al rojo vivo en segundos). El control de la temperatura es flexible, así que es posible utilizar perfiles de calentamiento y fases de mantenimiento intermedias. Asimismo, el calentamiento puede ajustarse de forma local para así calentar solo una zona parcial de un componente o varios puntos con distintos perfiles de temperatura.
Se recurre a la combinación de inducción y métodos convencionales de calentamiento mediante hornos para aumentar la potencia, tanto en líneas existentes como en nuevas planificaciones. En ese caso, hablamos de un calentamiento híbrido. Se puede mejorar el rendimiento y el rango de temperatura del horno mediante inducción anterior o posterior. En este caso, el tamaño del horno se reduce considerablemente, lo que también conlleva ventajas en términos de espacio y consumo. También aumenta la flexibilidad para reaccionar a necesidades de producción diferentes en el menor tiempo posible, puesto que la potencia de calentamiento puede encenderse y apagarse a golpe de botón. La reducción de los gases de emisión que se logra con el calentamiento híbrido permite a nuestro clientes dar un paso más hacia la producción exenta de CO2.